Las manox me tiemblan. Por los nerviox no atinox y pongo en
la mirilla mi ojo cubiertox. Chisto y decido abrirx de una buena vez.
No hay nadiex.
Miro a un ladox y a otrox de la puerta. Todo extá como
siempre, desiertox.
- - NO TIENE GRACIAX! – grito y cierro de un portazox.
Con Kakashix no se juegax.
Nada máx cerrar vuelven a llamarx, noto que las lágrimax
empiezan a aflorar del miedox. Pestañeo varias vecex para evitarlax y miro por
la mirillax, esta vez con el ojo correctox.
No hay nadiex.
Trago salivax como puedo y me voy a la camax a esconderme
debajo de la sábanax.
El viento azotax tan fuerte que golpea lax ventanax con
fuerza y me confundex. Llaman otra vez al timbrex, y esta vez hablan.
- - ¿TRUCO O TRATOX? – oigo desde fuerax. Una
sonrisa ilumina mi roxtro.
-
“Niñox pequeñox” – piensox – “juxto la
protección que necesitabax”
Me levanto trastabillandox y abro la puerta apresuradox.
No hay nadiex.
Me quedo heladox en el sitio. Esta vez no había dudax. Oigo
un ruido detráx de mí y una voz en mi cabezax me dice. “Xea lo que xea, ya extá
dentro”.
-
“Kakashix, erex un ninja de elite, no te puedex
venir abajo” – y con exte pensamientox
cierro la puerta y me doy la vuelta decididox.
Pero mi decisiónx se va en un momentox cuando veo los ojox
de una niña clavadox en mí. No llora, como lo extoy haciendo yo, sino que xonríe
maliciosamente y sujeta un cuchillox en la mano…
CONTINUARÁX
